Orense - Alto Támega

Viaje a Orense y Norte de Portugal (Alto Támega) Del 25 de julio al 4 de agosto de 2018

Miércoles, 25 de julio de 2018

De Barcelona a Salamanca, 796 Km. En Salamanca nos hemos alojado en el Hotel Gran Corona Sol, Avenida Villamayor, 31, Salamanca. 923281616. 

Tenemos toda la tarde, para hacer una visita a la ciudad, utilizamos la App de Salamanca con varios recorridos y una vista guiada de dos horas.

Salamanca es patrimonio de la humanidad.
Salimos de Plaza Mayor uno de los lugares emblemáticos de Salamanca. Si la Universidad es el centro cultural, la Plaza Mayor de Salamanca es el centro social. En los porches de esta plaza, con forma de cuadrilátero, hay numerosos cafés y restaurantes donde se reúnen tanto lugareños como turistas. Finalizada en 1756, en estilo barroco, alberga edificios como el Ayuntamiento.


Seguimos por el Corrillo y seguir por la Calle Meléndez, enseguida llegamos a la Clerecía y la Casa de las Conchas, un palacio construido en 1517 en estilo gótico con elementos platerescos y mudéjares, es uno de los edificios más singulares de la ciudad. La decoración de su fachada, con más de 300 conchas, es su elemento más característico y da nombre al edificio. En el interior, que alberga una biblioteca, no hay que perderse el claustro.





Al otro lado de la calle podemos visitar la importante Iglesia de la Clerecía, doblando la esquina de la Clerecía, sigues por la Calle Libreros, y a pocos metros está la fachada de la Universidad, donde buscamos la rana. 
La Universidad de Salamanca es el epicentro de la historia y vida cultural de Salamanca. Fundada el 1 de enero de 1218, es la universidad más antigua de España y la cuarta de Europa. Ha tenido rectores, profesores o alumnos tan ilustres como Unamuno, Fray Luis de León, Fernando de Rojas, San Juan de la Cruz, Hernán Cortés, Góngora o Calderón de la Barca. Una de las tradiciones más populares de la ciudad consiste en buscar una famosa rana en su preciosa fachada plateresca. Hemos visitado con la visita guiada el Edificio de Escuelas Mayores (claustro y antiguas aulas). La gran joya es la biblioteca. La pintura mural que cubría el techo de la misma, conocida como “Cielo de Salamanca” (s.XV), es uno de los símbolos de la ciudad  las cercanas Escuelas Menores.



Prácticamente en la trasera de la Universidad están las Catedrales, la Nueva y la Vieja. Puedes ver el Astronauta en la fachada de la Nueva. 
Aunque, por definición, una ciudad sólo puede tener una catedral, en Salamanca coexisten la Catedral Vieja y la Catedral Nueva. Ambas comparten uno de sus muros, pero tienen entradas independientes. La Catedral Nueva, edificada entre 1513 y 1733, debía sustituir a la Vieja, construida entre los siglos XII y XIV, pero finalmente se decidió que las dos convivieran. La Catedral Nueva, más visible desde la Plaza Anaya y casi desde cualquier punto de la ciudad, está construida principalmente en los estilos gótico tardío y barroco. Destacan el cimborrio, el campanario, su imponente interior y la decoración de las puertas. Encontramos el famoso astronauta (otro símbolo de la ciudad) en la Puerta de Ramos. En la Catedral Vieja, de estilos románico y gótico, destacan la Torre del Gallo, el retablo mayor y las capillas.







Justo enfrente está el Palacio de Anaya, actual Facultad de Filología. Desde aquí a la cueva de Salamanca. La leyenda dice que en la cripta de la antigua iglesia de San Cebrián, ya desaparecida, daba clases el Diablo. 
La Catedral Vieja, anexa a la Nueva, conforma con ésta el conjunto conocido como Patio Chico, de gran belleza. A escasos metros, está el Huerto de Calixto y Melibea, jardín desde el que se puede contemplar la Muralla, el río y las Catedrales, entre otros.No es que atesore una belleza extraordinaria el pequeño jardín de Calixto y Melibea, pero dos aspectos hacen que sea tan popular: por una parte, este fue el escenario que Fernando de Rojas habría escogido para recrear su famosa obra “La Celestina” y, por otra, desde sus barandillas tenemos unas preciosas vistas del Tormes, las catedrales, la muralla medieval y otros muchos puntos de la ciudad. 

Podemos seguir hasta el Museo Art Nouveau Art Déco, está la Casa Lis, finalizada en 1905, es un bello palacete de estilo modernista. Situado al borde de la muralla, muy próximo al río, rompe con la estética del resto de edificios del casco viejo y, de hecho, es el único ejemplo de arquitectura modernista en Salamanca. Nosostros no entramos.
Continuamos hasta el Colegio San Ambrosio (Centro de la Memoria Histórica). Siguiendo la Calle hacia abajo, llegarás a las cercanías del Puente Romano se calcula que el antiquísimo Puente Mayor del Tormes, más conocido como Puente Romano de Salamanca, podría haber sido construido hacia el s.I, en tiempos de Trajano. Desastres naturales y otros contratiempos han hecho necesarias numerosas reparaciones a lo largo de su historia, pero aún mantiene varios elementos originales. A lo largo de su recorrido peatonal, de unos 350m., tenemos numerosas oportunidades de fotografiar el río Tormes o de tomar una panorámica de la ciudad. En el inicio del puente, en la zona de la muralla, se encuentra otro de los símbolos de la ciudad: el Verraco. Se dice que esta estatua de un toro de piedra sin cabeza es la más antigua de la ciudad. Muy cerca podemos encontrar una estatua del Lazarillo de Tormes, obra en la que se menciona dicho Verraco.
A continuación la muralla y la Iglesia de Santiago.







Jueves, 26 de julio de 2018


Desde Salamanca, vamos hacia Verín, 256 Km.

Compra y comida en Verin. Casa do pulpo, Avenida Portugal 24, 32600 Verín.

De Verin a Paradela 46 Km, nos alojamos en el pueblo de mi madre. En el entorno hay varias casas rurales, Casa do Eiro, en Calvos de Randin, los propietarios son mis tíos, a escasos cinco kilómetros y Rousia en Baltar a  15, por ambas poblaciones se pasa varias veces en las rutas señaladas.

Tarde para instalarnos.






Viernes, 27 de julio de 2018

Hoy es día de feria en Xinzo (todos los días 14 y 27 de cada mes), con lo cual toca ir a comer el pulpo. Desayunamos en casa y nos vamos a ver la Feria, una vuelta por el pueblo y comer. 


Para aprovechar la tarde nos acercarnos a Allariz. 19 km, vamos por la carretera vieja.
Allariz está envuelta en no pocas leyendas. Una de ellas hace referencia a su fundación en el siglo VI por un rey o caballero suevo de nombre Alarico. En todo caso, sabemos que la zona estaba habitada desde mucho antes. Los vestigios castreños son numerosos y el propio río que la atraviesa, el Arnoia, posee una etimología paleoeuropea presente en otros lugares del continente.
Precisamente alrededor del río se concentran diferentes espacios verdes que conforman uno de los grandes atractivos de Allariz. Las principales áreas de recreo son:
Paseo de la Alameda: casi a la entrada al casco histórico, discurre por uno de los márgenes del río. A lo largo del paseo se hallan algunos viejos molinos rehabilitados como establecimientos de ocio e incluso una antigua fábrica en la que se trataba el cuero y que actualmente funciona como museo-restaurante. El paseo también cuenta con un embarcadero en el que se puede alquilar una barca durante la temporada estival.
El Arnado: se trata de una hermosa área que está junto al puente románico de Vilanova, uno de los símbolos de Allariz.
Complejo de Vilanova: enfrente del Arnado, en la otra orilla del Arnoia. Ofrece una amplia zona de esparcimiento ideal para niños. También aquí el río cuenta con un molino sabiamente rehabilitado e integrado en el entorno con una gran terraza sobre un tapiz de césped.
Pasear por las enlosadas y cuidadas calles con tanto que ver en Allariz resulta un placer, entre otros motivos porque su Casco Histórico se conserva en buen estado gracias al esfuerzo de restauración y rehabilitación de los últimos años, que le hicieron merecedora del Premio Europeo de Urbanismo en 1994. En su trazado típicamente medieval, vinculado al Camino de Santiago y rodeado por bosques de castaños, encontramos importantes construcciones religiosas. En la parte alta de la villa se encuentra el Campo da Barreira, una gran explanada que acoge los mercados de los días 1 y 15 de cada mes y que alberga en su centro una fuente circular con un árbol fasciculado, obra de Ferro Caaveiro (1783). La plaza delimita con el Santuario barroco de San Benito y con el Monasterio de Santa Clara, fundado en 1268 por la reina Violante, esposa de Alfonso X. Reconstruido en el siglo XVIII, posee el mayor claustro barroco de España. Aquí residen monjas en estricta clausura por lo que no es posible acceder más que a la iglesia y al museo, que contiene dos piezas de máximo interés: la VirxeAbrideira de marfil, y una cruz de cristal y esmaltes.
En el núcleo del casco antiguo, la Plaza de la Villa o Mayor con su fuente de dos caños, están el ayuntamiento y la Iglesia de Santiago. Iniciada hacia el año 1119, es un ejemplar arquetípico del románico popular gallego, de nave única y ábside semicircular, que tiene la particularidad de conservar íntegramente su estructura primitiva. 
La mejor panorámica de Allariz se obtiene subiendo al Penedo da Vela, en lo que antiguamente era el emplazamiento de una fortaleza defensiva. Del castillo apenas quedan algunos restos en forma de muralla, pero las vistas merecen la pena.






















Al irnos nos acercarnos a visitar la Basílica románica de Santa Marina de Aguasantas o Augas Santas (s. XII-XIII), declarada Conjunto Histórico-Artístico en 1963. Hemos podido vistarla por dentro pues nos han dicho que hay un vecino que la enseña, incluso hemos podido ver el mecanismo del reloj en lo alto de la torre. Santa Marina perteneció a una comunidad de canónigos agustinianos y constituye un atractivo conjunto histórico, artístico y paisajístico en el que se mezclan historia, tradición y leyenda. La tradición del lugar nace vinculada a la existencia y martirio de Mariña, que se resiste a los deseos del prefecto Olibrio y acaba muriendo decapitada, manando tres fuentes por cada uno de los botes que dio su cabeza. El templo, construido en el lugar en que fue enterrada, consta de tres naves y cabecera de triple ábside y su interior se ilumina a través de tres rosetones situados encima de la cabecera. Como curiosidad encontramos el “horno de la Santa”, donde cuenta la tradición que esta fue martirizada.
Hay rutas y visitas que te cautivan, y esta es una de ellas. Esta aldea es conjunto histórico artístico y alberga algunos “tesoros” que merece la pena ver. Para llegar hay que salir de Allariz por la Nacional 525 y desviarse a la derecha siguiendo las indicaciones.







Dejando el coche en el pueblo, en las inmediaciones de la Iglesia, arranca una ruta que baja por una antigua calzada de grandes losas de piedra hasta un lugar donde se alza una basílica de origen templario. Nada nos podía gustar más, así que recorrimos los 600 metros por aquellos enormes e irregulares adoquines hasta el lugar, bajando una pendiente algo pronunciada que luego hay que subir de vuelta. La iglesia, del siglo XII, está inacabada, y es conjunto monumental desde 1955, pero lo más chulo sin lugar a dudas es la cripta.

La bajada es por cualquier de las dos puertas laterales y hay que hacerla casi a oscuras. Una vez abajo se acostumbra la vista, gracias a un pequeño ventanuco, y puedes ver un espacio con el suelo lleno de losas de piedra que posiblemente fueran lápidas. Hay también una piscina cuadrada que nos recordó la que habíamos visto en Santa Eulalia de Bóveda, probablemente vinculada a algún rito curativo o religioso. La ruta esta en el Wikiloc, https://es.wikiloc.com/rutas-a-pie/santa-marina-de-augasantas-iglesia-siglo-vi-26983304
















No sabemos si, como defiende Cid Rumbao, Allariz llegó a ser realmente la capital del Reino de Galicia. De lo que no hay duda es de que se trata de la actual capital del outlet gallego. Se cuentan por docenas las tiendas outlet que hay en el centro histórico. No faltan las principales marcas de moda, calzado o decoración. Muchas tiendas están situadas en los bajos de elegantes casonas y edificios nobles. De modo que, al final, ir de compras por el centro de Allariz se convierte en una experiencia llena de encanto y glamour. Lo mejor de todo es que, al ser establecimientos outlet, es posible comprar artículos de las firmas más prestigiosas a precios reducidos.
Regreso a Paradela, 59 Km.

Sábado, 28 de julio de 2018

Ruta por Verin – Cabreiroa – Monterrey –Pobra de Trives – Castro Caldelas

Salimos de Paradela hasta Verin, 46 Km.

Verín es una bella localidad perteneciente a la provincia de Ourense, localizado en el sureste de la provincia de Ourense, a orillas del río Támega. En ella destacan los manantiales de agua como Cabreiroá y Sousas, lugares de interés están en la zona antigua del pueblo. Aquí podemos ver la iglesia de Santa María la Mayor del siglo XVII, la iglesia y convento de los Padres Mercedarios o las casas de los Acevedo y la casa del Escudo o del asistente, llamada así porque fue construida para el asistente del Conde de Monterrei. Plaza de la Merced, la Plaza Mayor.También podemos dar un paseo por la plaza de la Alameda o por las orillas del Támega. 





Dentro la arquitectura religiosa también podemos visitar hacia el norte por la carretera que va a Campobecerros, el Santuario de los Remedios, comenzado a construir en el siglo XVI y la destacada fortificación medieval de Monterrei (enfrente al Parador).
En sus orígenes fue una villa romana. Durante el Medievo la villa perdió su dominio y Monterrey centralizó el territorio y la vida de la comarca en torno a sus condes y señores. Se convirtió durante la Edad Media en una población agrícola y tranquila, aunque a menudo se vio envuelta en los conflictos bélicos de los sucesivos gobernantes de Monterrey, así como las disputas fronterizas entre España y Portugal. Todo está en unos metros
Desde aquí nos vamos al Balneario de Cabreiroa, 5 m. 2 km.
Situado en la aldea de Cabreiroá, junto a Verín, nos encontramos con el Balneario de Cabreiroá, en cuyo recinto se encuentra el manantial, las instalaciones de la embotelladora de aguas minerales, y el edificio del balneario (que en la actualidad se encuentra cerrado).
Se puede visitar el manantial de Cabreiroá, que se sitúa en una pequeña y bella edificación, donde podremos ver un depósito que muestra como emergen las aguas, que son carbonatadas.Además, existe un grifo donde podremos degustar en vivo las aguas puras, recién emergidas. 
La visita al manantial y al recinto es totalmente libre y gratis (la planta envasadora no). Además, existe un gran aparcamiento para que nos acerquemos en coche, ya que se encuentra a 2 km del centro de Verín. Una vez llegado frente al balneario, seguiremos las indicaciones que pone aparcamiento Agüistas. Ahí dejaremos el coche y a pocos metros encontramos el recinto. 
Las aguas emergen con su propio gas natural, tratándose de unas aguas bicarbonatadas, sódicas, litínicas y acídulas.Como curiosidad, las aguas que se usan para el el envasado sin gas son de mineralización débil, las del embotellado con gas son de mineralización fuerte. 
Las aguas de Cabreiroá son unas aguas bicarbonatadas sódicas, que emergen a 16 grados con un caudal de 8 litros por minuto. Son unas aguas casi únicas por sus características, donde la concentración de anhídrido carbónico, bicarbonato sódico, bicarbonato lítico y bicarbonato potásico no aparece en otras aguas acídulas alcalinas de la península y se da en pocos manantiales europeos. 
Las aguas del manantial son ideales para dolencias y problemas de las vías urinarias (infecciones urinarias, cólicos nefríticos, cálculos, cistitis...), para trastornos gastro-hepáticos y biliares (gastritis, cólicos hepáticos, calculos, ...) y los metabólicos (como la diabetes y la hiperurcemia). 
Podemos probar estas aguas en el pabellon del manantial. 





Desde aquí a Monterrey 7 Km.
La imponente fortaleza de Monterrei. Declarada Monumento nacional en 1931 y actualmente Bien de Interés Cultural, la Fortaleza de Monterrei es la mayor acrópolis gallega y también la mejor conservada. Históricamente se ha tratado de unos de los principales puntos estratégicos de defensa de la frontera por su proximidad con Portugal. En todo su conjunto cuenta con tres recintos amurallados con edificaciones de distinta índole: El palacio de los Condes, la Torre del Homenaje y la Torre de las Damas, La iglesia de Santa Maria Gracia y el Hospital de Peregrinos.
El conjunto monumental de Monterrey se encuentra en una colina que domina el valle del río Támega, en la hermosa localidad de Verín, provincia de Ourense, a unos 70 kilómetros de la capital y a escasos 30 kilómetros de Portugal. El conjunto fortificado se construyó, en su mayor parte entre los siglos XIV y XV, llegando a convertirse, a finales del XV, en una de las residencias señoriales más importantes de toda Galicia. Esto se debió, en parte, a su situación estratégica y al control que ejercía sobre las comunicaciones terrestres de Portugal con la meseta.
Su fortaleza señorial mostraba con orgullo la riqueza de la que disfrutaban sus ocupantes al tener dos torres del homenaje, un símbolo de poder del que carecían el resto de castillos de las familias rivales. Otra prueba de la riqueza y la importancia que llegó a alcanzar Monterrey es que fue aquí donde se instaló la primera imprenta de toda Galicia, ya a finales del siglo XV, y en donde se imprimió el famoso Misal Auriense (1494). Se trata del más antiguo libro datado impreso en Galicia, y del que tan sólo se han conservado dos ejemplares, uno en pergamino, custodiado en el Archivo de la Catedral de Ourense, y el otro en papel, en la Biblioteca Nacional de España.




















De Monterrey a Pobra de Trives  105 km. Parando a Comer en Viana do Bollo, que estaba en Feria en el restaurante Pingallo, de tapas excelente.


A Pobra de Trives es otro de los innumerables ejemplos del incesante despoblamiento del interior de Galicia. Enclavado en la montaña ourensana, en el Macizo Central, ha pasado de 6000 habitantes hace unos años a sólo 2000 en la actualidad.
Por aquí se pasearon los romanos. Recuerdo de aquellos tiempos lo tenemos en un miliario de la Vía Nova, en una plaza de Trives.
En la Edad Media, Pobra de Trives gozaba de notable relevancia. Muestra de ello son las grandes casas señoriales y pazos que se conservan en pleno centro o en los alrededores, como el pazo de los Casanova, o la Casa Grande de Trives, que ha visto crecer generaciones de nobleza. En las últimas décadas del siglo XX, la Casa Grande se convirtió en pionera del turismo rural en Galicia, y donde hemos tenido el placer de alojarnos en varias ocasiones.
La plaza del Pilón, y las calles empedradas, casas de granito con escudos blasonados, fachadas de galerías, son la herencia de un pasado de condes y marqueses, y ahora son el marco para un paseo por Pobra de Trives.









Nos dirigimos a Pena Feloche 6 m. 3,4 Km
Pena Folenche una aldea situada a casi 900 m de altura, con muchas casas rehabilitadas. Recibe su nombre de una peña granítica situada justo en el centro del pueblo .La cima de la peña constituye una excelente atalaya, por lo que resulta obligado subir. Desde el mirador de Pena Folenche. Si queremos adentrarnos en el bosque atravesamos la aldea y ya casi cuando dejamos atrás las casas, veréis un panel informativo de la ruta en el que, por desgracia, ya es imposible leer nada. Pues bien, ahí mismo o unos metros más adelante, hay espacio para aparcar.





Desde Pena Foleche a Ponte Navea 8 m, 6,5 Km
Ponte Navea, vamos a iniciar una ruta de senderismo por soutos de castaños centenarios hasta el puente sobre el rio Navea
En Ponte Navea, también llamado Trives Vello, se han encontrado numerosos vestigios romanos. Uno de ellos es el Ara de Vilanova, un bloque granítico hallado en la capilla de la Encarnación, con la inscripción “Severo, hijo de Flavio, cumple con devoción el ofrecimiento de Júpiter, Optimo Maximo”. Por ello, se considera que la actual iglesia está construida sobre un antiguo templo romano. La cruz de malta inscrita en su fachada es una señal del paso de peregrinos hacia Santiago.
El actual puente es también de origen romano. En el medievo fue reconstruido, quedando más estrecho que el original, tal como lo vemos ahora. Y es el puente el que da nombre al lugar, en el que la antigua aldea de Trives Vello está ahora abandonada. Un lugar precioso, oculto en la frondosidad de la fraga.
Y es que por aquí pasaba la Vía Nova romana, que unía Bracara (Braga) con Asturica (Astorga), importante vía de comunicación en aquellos tiempos. Todavía se conservan miliarios de señalización del camino romano.










De Ponte Navea a Castro Caldelas, 15 Km.
Paseo por el casco medieval, para seguidamente tomar la carretera escénica de Castro-Caldelas a Monforte, que cruza el Sil por el puente de A Teixeira. Las vistas sobre las terrazas de viñedos que se encaraman sobre las pendientes laderas de la Ribeira Sacra del Sil son espléndidas. 10 Km. y al atardecer tienen un esplendor todavía más especial.
La fortaleza es el símbolo más visible de su historia. Construida en el s. XIV, aunque se piensa que ya existía una fortificación en la época castreña o tardo-romana. Fue arruinada en las revueltas Irmandiñas (s. XV) y reconstruida enseguida. La planta del castillo se adapta a la orografía del lugar, del cual se conservan casi todos los lienzos de la muralla, tres torres cuadrangulares y el patio de armas. La puerta principal tiene arco de medio punto con doble escudo de piedra. A la derecha de la entrada se levanta la torre del reloj con arco de medio punto. La Torre da Homenaxe flanquea la puerta por el otro lado y es de planta rectangular. Por la parte interior de la muralla discurre el Camiño de Ronda, que enlaza con la casa del administrador y con la torre del reloj. Son también destacables la presencia de un pozo o aljibe circular y un corredor de madera sobre el patio. Las dependencias que rodean ese patio albergan un interesante museo etnográfico y de arquitectura popular ourensana, que muestra también restos arqueológicos.








Desde el puente de la Teixera, regresamos a casa 105 Km.

Domingo, 29 de julio de 2018
Ruta por Verin – Cidadella – Chaves – Montalegre
Salimos de Paradela hasta Verin, y de aquí a Soutochao. 67 Km.
Una carreterilla que va a Portugal. Así de fácil llegamos al área recreativa Cidadella, situada al borde del río, con zona de picnic y unos molinos restaurados.
Durante el siguiente tramo de la ruta recorremos el bonito sendero fluvial. No hay que desanimarse porque lo más difícil está al principio, con zonas resbaladizas. Después, el sendero es más fácil. Es un mundo mágico de trasnos, un fabuloso bosque de ribera siguiendo el curso del río. Un entorno frondoso y precioso.
Más adelante, el río se encaja en el Lombo de Mendoza, una garganta de roca, salvando un gran desnivel para llegar a Portugal. Así se precipita desde gran altura formando la fervenza de Cidadella, que primero pega un salto más pequeño para lanzarse después al vacío. Muy bonita.
Sus alrededores están muy cuidados, con senderos, puentes y miradores, que permiten apreciarla desde distintos puntos de vista, desde arriba, desde su base, o desde enfrente. El paisaje que la rodea también es digno de apreciar, rozando Portugal, divisando la aldea portuguesa de Segirei en medio de un valle rodeado de sierras de suaves ondulaciones del Parque Natural Montezinho. 
Ruta en wikiloc: 





















Tras regresar al área recreativa continuamos en dirección a Tomonte. Este tramo discurre por paisajes abiertos hacia el ondulado relieve. Todo está muy florido.
De Soutochao a Chaves, 59 m. 41 Km.
Chaves, una ciudad del norte de Portugal en el que sus aguas adquieren protagonismo. Chaves también posee un patrimonio romano y medieval que es digno de una visita. 
Chaves está situada en un promontorio sobre el valle del río Támega, que es el que divide en dos a Chaves.
Chaves es una ciudad milenaria, en época de la ocupación romana se le conocía por el nombre de “Acquae Flaviae”, que fue el nombre que le dio el emperador Flavio Vespasiano, debido a los manantiales termales que se encuentran aquí.
Desde la época romana la ciudad ha sido una reputada estación termal. Las aguas termales surgen muy cerca del centro urbano. La calidad de sus aguas es extraordinaria, son aguas minero medicinales, que sirven para tratar diversos trastornos.
Su nombre actual es el plural de la palabra chave (llave) y es que por su posición siempre fue un punto fronterizo clave. En el propio escudo de la ciudad aparecen unas llaves, representativas de esa situación.
En Chaves vemos: El puente romano, de la época romana se conserva el puente de Trajano de 140 m de largo, sobre el río Támega. Es un puente de granito con 18 arcos, de los cuales solo quedan 12, el resto están sepultados.
Fue construido a finales del siglo I a principios del siglo II. Todavía se encuentran en mitad del puente dos columnas conmemorativas con sus inscripciones, que testifican que el puente fue edificado durante el reinado del emperador Trajano. Una de estas columnas es el llamado Padrao dos Povos (Padrón de los Pueblos). El texto de la columna contiene una lista de los diez pueblos indígenas de la Gallaecia (la provincia romana en la que estaba situada Aquae Flaviae), que colaboraron en la construcción del puente.
Actualmente el puente romano es peatonal. 
El casco antiguo de Chaves o Barrio del Castillo, es el centro histórico de Chaves. En la Edad Media Chaves estaba rodeada de murallas. En el interior la población vivía en un apretado núcleo urbano, en pequeñas casas de varios pisos. La mayoría de las calles eran estrechas y todavía se puede ver esa estructura. Para rentabilizar el espacio intramuros era habitual construir balcones en los pisos superiores, en madera de castaño o pino. Todavía se conservan muchos de ellos. Los edificios más notables de la ciudad se agrupan en torno a dos plazas, la Praça de Camões y la Praça da República. Aquí callejeamos, vamos por la Rua Direita, que es la calle principal del Barrio del Castillo. A mitad de la Rua Direita se abre una plaza, la Praça da República en cuyo centro se alza el Pelourinho.
El Pelourinho de Chaves es una columna, picota o rollo de justicia de estilo manuelino. Representa un símbolo de la independencia judicial que alcanzó Chaves.
La Plaza de Camões es la plaza más noble de Chaves. Una amplia plaza monumental en la que se encuentran varios edificios de interés.
O Paços do Concelho, el palacete más bonito de la ciudad, fue construido a mediados del siglo XIX. Antes de concluir su construcción fue puesto a la venta por su propietario y adquirido por el ayuntamiento de Chaves en 1861. Desde entonces cumple la función de ayuntamiento.
En uno de los lados de la plaza se encuentra el Paço dos Duques de Bragança (Palacio de los Duques de Braganza). Fue mandado construir en el siglo XV por D. Alfonso I, primer Duque de Braganza, para ser su residencia personal. Una estatua de bronce que representa a este mismo personaje preside la plaza. 
En la plaza también se encuentran tres iglesias: la Iglesia de Santa Maria Maior, la Iglesia de la Misericordia y la Capilla de la Senhora da Cabeça.
o Iglesia Parroquial de Santa Maria Maior. La iglesia parroquial o matriz de Santa María la Mayor, tiene el privilegio de asomarse a las dos plazas principales de Chaves, la de Camoes y la de la República. De su origen románico solo conserva la puerta principal y la torre. Tiene tres arquivoltas decoradas con flores, corones, medallones y bolas típicas del románico gallego. En una inscripción puede leerse “A las malas lenguas estas figas”.
Iglesia de la Misericordia, dicen que la iglesia de la Misericordia es la más bonita de Chaves. Data de finales del siglo XVII y fue edificada en estilo barroco con elementos renacentistas. Parece ser que esta era la capilla del Paço de los Duques de Bragança. Las paredes del interior están completamente decoradas con azulejos azules, representando escenas bíblicas. Llama la atención el techo plano de madera pintada, con la escena de la La Praça de Camões 
El Castillo de Chaves fue construido sobre un posible castro y fortificación romana. Actualmente sólo conserva la Torre de Homenaje y restos de las murallas que rodeaban la iglesia de la Misericordia de Chaves a la antigua ciudadela. Fue arrasado varias veces, durante las invasiones germánicas y árabes, y reconstruido posteriormente. Se encuentra muy cerca de la Praça de Camoes y ahora se puede pasear por los cuidados jardines del castillo y visitar la imponente torre del homenaje del siglo XIV. Desde aquí se puede disfrutar las magníficas vistas de la vega del Támega. Hay numerosos restos romanos y medievales repartidos por la zona ajardinada como miliarios y objetos como relojes de sol. La Torre del Homenaje alberga el Museo Militar con armas antiguas, armaduras, recuerdos de la primera guerra mundial y objetos procedentes de las colonias.
















Comida en restaurante O’Pote, muy recomendado.
De Chaves a Montalegre, Sabuzedo – Mourilhe – Tourem – Paradela, 77 Km.
Montalegre:
Una vuelta por el pueblo vemos la escultura de “A chega dos bois” de raza Barrosa, que es la atracción más típica del pueblo
El pueblo de Montalegre se alza sobre un cerro granítico, a 980 metros de altitud, protegido por uno de los castillos medievales más hermosos de Portugal, integrado en una región de gran belleza natural. Más del 25 % del territorio del municipio forma parte del Parque Nacional de Peneda Gerês y en él encontramos pueblos serranos estancados en el tiempo, como Pitões das Júnias. Aquí, los principales atractivos son el monasterio cisterciense de Santa María y los saltos de agua del río Campesinho y del regato de Pitões. Por estas tierras pasaron lusitanos, celtas, visigodos, suevos y romanos, que dejaron importantes vestigios históricos por todo el municipio. Más recientes son las iglesias románicas de San Vicente de Chã y de Viande, así como el legendario puente de Misarela, también llamado puente del Diablo. Montalegre es una de las regiones portuguesas en donde mejor se come. En la mesa, se sirve un harto menú que abarca desde la afamada ternera barrosana, hasta los platos de cabrito y de truchas, estas últimas preparadas en general con el mejor jamón local. Además de ello, el municipio es muy conocido por su producción de embutidos y ahumados, apreciados productos tradicionales de la región que todos los años atraen a miles de personas a la Feria del Ahumado, que se realiza en enero.
Pasamos por Sabuzedo y Mourilhe (los pueblos de mi abuela materna). Y luego regresamos a casa. 









Lunes, 30 de julio de 2018
Ruta por la Ribera Sacra 
Salimos de Paradela hasta la Fabrica de la Luz, 95 Km.


Desde la Fabrica de la Luz, hacemos una pequeña caminata por las pasarelas del del río Mao. Se trata de una pasarela de madera que alterna trechos rectos con tramos de escaleras. Se localizan en una zona escarpada del río Mao. Para llegar hasta allí nos dirigimos en coche hasta la Fábrica de Luz, entre Cristosende y Parada de Sil. Este edificio pertenecía a una antigua central hidroeléctrica. Ahora se ha convertido en albergue y dispone de cantina. Existe espacio limitado para aparcar algunos coches tanto al lado de la Fábrica de Luz como en la carretera.
Las pasarelas del río Mao permiten adentrarnos en el relieve abrupto del cañón que ha excavado el río Mao antes de desembocar en el Sil. Es un recorrido interpretativo entre la espesa vegetación que ocupa el cañón, con paneles explicativos acerca de la fauna y la flora. El río debe salvar un relieve escarpado, abalanzándose con viveza por la abrupta orografía.
Al finalizarse el kilómetro que mide la pasarela de madera continúa un sendero a nivel del río en la desembocadura del Mao en el Sil. En esta época de bajo nivel de agua podemos apreciar recuerdos del pasado que han quedado anegados tras la construcción del embalse de Santo Estevo en el Sil. Vemos ruinas de antiguas construcciones así como terrazas de cultivo que llegaban hasta el antiguo borde del río, y que ahora permanecen habitualmente bajo las aguas. 
Continuamos el paseo hasta la aldea de Barxacova, y desde aquí a San Lorezo de Barxacova y vuelta a la Fabrica de la Luz.
Ruta de wikiloc: https://es.wikiloc.com/rutas-senderismo/pasarelas-del-rio-mao-fabrica-de-la-luz-san-lourenzo-de-barxacoba-27075413






























Desde la Fabrica de la Luz nos dirigimos a Robacallos y Entrambosrios y a su famoso castaño milenario,  un ligero paseo por un sendero al lado de este nos permite contemplar un precioso bosque de castaños.











Continuamos por los Viñedos de de San Vitorio al embalse de Santo Estevo en el rio Sil, vamos a Rabacallos.
Desde aquí nos dirigimos a los miradores de los Balcones de Madrid, pasando Sardela, Parada de Sil y por Fondo de Vila. Este mirador es uno de los más famosos, su nombre recuerda a las despedidas de los jóvenes que partían caminando hasta Monforte para tomar el tren hacia Madrid
Podemos ver la Iglesia de Cadeiras en frente.




Continuamos dirección Monasterio de Santa Cristina, pasamos por Portela.
De Portela a Castro y al mirador de As Xariñas de Castro y de aquí al Monasterio Iglesia de Santa Cristina. Construido en torno al siglo XII, es un magnífico ejemplo del románico, que actualmente se encuentra abandonado, aunque ha sido parcialmente restaurado en los últimos años.
Este monasterio se emplaza en un lugar de total recogimiento. No goza de vistas, como otros, sino que queda escondido en medio del souto de Merilán. Estos monjes vivían de las rentas que recibían del vino y de las castañas. Tanto les gustaba el vino que incluso tenían limitado el consumo diario en función de su rango. 

















Nos trasladamos a San Estevo de Ribas do Sil, 21 Km, pasaremos por varios miradores el más espectacular es de la columna, para llegar hasta él debemos circular por la carretera GR-56 entre las parroquias de Caxide y Cerreda y en km 29 encontraremos una pista por la cual debemos andar alrededor de 100 metros para llegar hasta este magnífico mirador, lastima del tendido de alta tensión. 




El Monasterio de Santo Estevo es de origen benedictino, originario del siglo VII, y reconstruido hace unos años para convertirlo en hotel. Tiene unos claustros preciosos, y se encuentra en un entorno magnífico en los Cañones del Sil. Declarado Monumento Histórico Artístico en el año 1923.
Desde el Monasetrio Parador nos dirigimos a Pombar y vemos su famoso Canastro de Pombar. Desde aquí regeresamos 92 km.










Martes, 31 de julio de 2018


Ruta en coche por el Parque Nacional PenedaGeres
En esta ruta en coche por el Parque Nacional PenedaGeres exploramos el único Parque Nacional de Portugal. Varias sierras y varios valles lo componen, caracterizándose por una orografía enrevesada que ha ocasionado el aislamiento secular de esta zona. Como consecuencia, se ha preservado la idiosincrasia de esta área tan rural, donde siguen viviendo como antaño en pequeñas aldeas. 
Hermosos paisajes y pueblos de otros tiempos que perduran hasta hoy es lo que nos ofrece el Parque Nacional PenedaGeres, al norte de Portugal. Las carreteras que recorren estos lugares son estrechas y reviradas, a la vez que panorámicas.
De Paradela a Serra Laboreiro, 50 Km. 
Castro Laboreiro es una buena base para explorar la Serra Laboreiro, una de las sierras que componen el Parque Nacional PenedaGeres. La aldea de montaña de Castro Laboreiro se asienta a 1000 m de altura, perteneciente al municipio de Melgaço. 
Es una aldea con vistas al Valle del río Castro Laboreiro, las cuales se pueden contemplar desde el mirador (miradouro do Castelo). También desde el mirador observamos los restos del antiguo castillo, erguido sobre un promontorio a nuestra izquierda. Un sendero permite subir al castillo, para explorar las ruinas y gozar de una panorámica encantadora.















Desplazándonos en coche por la Serra Laboreiro conocemos pequeñas aldeas en las que las mujeres todavía visten de luto riguroso, se atan pañuelos negros a la cabeza, y lavan la ropa a mano en los lavaderos públicos. La agricultura y ganadería de subsistencia son su medio de vida. Y es que en la Sierra Laboreiro, al igual que en otras del Parque Nacional, como la Peneda, existe una planicie a 1000 m de altura. Estos planaltos ya fueron habitados por los ancestros hace miles de años. A Castro Laboreiro llegamos desde España por Entrimo (Ourense), 
En Lamas de Mouro se halla un centro de visitantes que facilita información sobre el Parque Nacional Peneda-Gerés. 
Desde Lamas de Mouro continúa una carretera a la aldea de Peneda donde se localiza el Santuario de Nosa Señora da Peneda, el cual es un centro de peregrinación, y por tanto, uno de los sitios más visitados del Parque Nacional PenedaGerés. El Santuario venera a la Virxe da Peneda, y se encaja entre peñascos rocosos. Hemos dejado atrás el municipio de Melgaço y hemos entrado en el de Arcos de Valdevez.













Cruzamos la aldea de la Peneda y  cruzamos el río Peneda accedemos a una carretera que conduce a Soajo. Esta carretera es más precaria, y el valle muy encajado y arbolado en esta zona.
Más adelante, el valle se amplía y en sus laderas se asientan pequeñas y pintorescas aldeas. Los socalcos de cultivos suelen acompañar a cada una de las aldeas. Es el caso de la aldea de Rouça. Desde la carretera obtenemos imágenes muy fotogénicas.
La ubicación de Tibo es sensacional. Se sienta sobre la única superficie plana, encajado en el escarpado relieve. Toda esta carretera entre La Peneda y Soajo es muy panorámica, y nos regala unas estampas preciosas. Cuando se ha ganado cierta altura hay un mirador fabuloso, Miradouro do Vale da Peneda, desde el que divisamos la Peneda, Tibo, Rouça, y otras cuantas aldeas integradas en el paisaje de cumbres graníticas y valles verdes.








Nada más pasar el mirador empezamos divisar el embalse transfronterizo de Lindoso. Sobre una ladera cuelga la aldea gallega de Olelas, mientras que la otra orilla pertenece a Portugal. La carretera desciende entonces, pasando por Adrão. El relieve se suaviza al acercarnos a Soajo.




Soajo es la población que da nombre a la Serra de Soajo. Pertenece al municipio de Arcos de Valdevez. En Soajo destaca su conjunto de espigueiros (hórreos). Es una visita bastante popular. Hay al menos dos docenas de hórreos agrupados en un área común.  Comemos en restaurante Casa de Videira: posta de cachena, la vaca típica de Peneda-Gerés.
Soajo se ubica a sólo 300 m de altura, por lo que notamos la calidez del clima cuando bajamos de la sierra. Los terrenos de cultivo la rodean, y muchos viñedos crecen emparrados.




































De Soajo a Entre Ambos Rios, 12 Km.
La Serra Amarela se emplaza al sur de Soajo y Lindoso. Es otra de las sierras que componen el Parque Nacional PenedaGeres. Accedemos en coche desde Ponte da Barca, tomando dirección hacia Entre Ambos Ríos. En Ambos Ríos, tomamos la estrecha y sinuosa carretera de montaña que sube a los pueblos de la Serra Amarela. Más adelante, la carretera se bifurca, un ramal hacia Germil y otro hacia Ermida. En este caso nos dirigimos a Ermida, pasando antes por la aldea de Lourido.
La escénica carretera entre Lourido y Ermida pone a prueba el vértigo, circulando al borde del precipicio que cae al estrecho valle. En Ermida se acaba la carretera. 
En Ermida encontramos un mirador acondicionado con excelentes vistas a la sierra y al valle del Lima. La imagen de Ermida resulta fabulosa, entre las montañas de la Serra Amarela y las terrazas de cultivo que se despliegan escalonadamente por la ladera.
La aldea se asienta sobre terrenos de cultivo que se escalonan en terrazas ladera abajo. 





El otro ramal de la carretera nos conduce a Germil tampoco tiene desperdicio.


Retrocedemos para ir hasta Lindoso, volviendo por Soajo por la carreterilla al norte del río Lima, circundando el embalse. Por esta carretera seguimos observando huellas de un pasado no tan lejano. Cabañas abandonadas rodeadas de terrazas de cultivo. Lástima que por esta zona está el paisaje muy degradado, efecto de los eucaliptos, de la presa y de las torretas eléctricas.
Pasamos las aldeas de Cunhas y Campo Grande antes de cruzar la presa y llegar a Lindoso. Este pueblo compone una bonita estampa, combinando el castillo y los espigueiros. Son un montón de hórreos (más de 60) agrupados en una eira junto al castillo de Lindoso. Y además se conservan en buen estado. No así el castillo, en situación bastante ruinosa. Su interior alberga un pequeño museo.
Desde Lindoso regresamos a Paradela, 45,3 Km.





































Miércoles, 1 de agosto de 2018
Paradela – Bande – Celanova: tradición judía y medieval 

Paradela – Bande. 23 Km.
Bande es un municipio de la comarca de A Baixa Limia al que le separan 42 km. de Ourense. Su río más importante es el Limia que delimita la frontera sureste del municipio hasta acabar formando el embalse de As Conchas, además de este río, las aguas del Cadós también acaban en este embalse. Hacia el noroeste encontramos los puntos de más altura del municipio llegando a alcanzar los 1184 metros de altitud en Penas Altas.
Despues de Bande vamos a la iglesia de Santa Comba, pasando por Aquis Querquennis.
A los pies del embalse de As Conchas se encuentra el conjunto de Aquis Querquennis, formado por un campamento militar romano, una mansión viaria que era como un hospedaje, y aguas termales. A unos metros del campamento se encuentra el centro de interpretación en donde se puede ver información sobre este lugar y sobre la Vía Nova romana. En su día eran punto de descanso en la Vía Nova de Braga a Astorga. No hay que ir muy lejos para visitar uno de los monumentos más importantes de Bande, la iglesia de Santa Comba, del siglo VII de la época visigoda, está declarado monumento histórico artístico y es una de las más antiguas de Galicia. Está asentada sobre un antiguo monasterio. Nos dirigimos a Bande en donde veremos la iglesia de San Pedro de Bande, del siglo XVIII.





















De Bande a Esmoriz 29 Km. y ruta hasta Padrenda- Freans
Padrenda: Ruta del río Gorgua. El río baja impetuoso formando saltos de agua que en el pasado eran aprovechados en varios molinos. Completaremos el recorrido por varias aldeas del entorno. Estamos en la comarca de Paradanta, al sur de Galicia.
Para llegar al municipio de Padrenda hace falta un poco de paciencia, no mucha, sólo un poco, y serpentear por esas carreteritas rurales que nos llevan a este municipio del sur de la provincia de Ourense, lindante con Portugal.
Llegamos a la aldea de Gorgua, luego la aldea de Quinta. Sus habitantes son sólo un puñado. La mayoría de las casas están abandonadas y cayéndose. Unas escaleras nos llevan hasta lo alto de un promontorio, el Mirador de Quinta, a algo más de 700 m de altura. Un lugar para deleitarse con las vistas hacia las sierras gallegas y portuguesas en cuyas laderas se salpican pequeños pueblecitos entre las arboledas.





Chan do Crego es otra pequeña aldea de 4 casas que se cruza en nuestro camino. No oímos ni un murmullo.
La siguiente población es Monterredondo, bastante más grande, con buenas muestras de arquitectura rural, y algún hórreo primorosamente adornado. Continuamos hasta la aldea de Lapiñeiras. Es un balcón sobre la ladera. Así llegamos a Freáns.
De Freans vamos a Melgaço, 22 Km.
La Villa de Melgaço en el Norte de Portugal se encuentra en la provincia más septentrional del distrito de Viana do Castelo, del mismo nombre. También es conocida por sus vinos y visitamos su núcleo histórico y el castillo.
Comemos en un restaurante en Melgaço (Portugal), cruzando el puente sobre el Miño desde Arbo. Adega Sabino, en Un bacalao con broa tremendo.















De Melgaço a Celanova 45 Km
En este municipio podemos encontrar un rico patrimonio artístico, tanto en el casco histórico de Celanova como en la villa de Vilanova dos Infantes. En Celanova se puede ver el Monasterio de San Salvador fundado en el siglo X por San Rosendo, en el que destaca su claustro. Al lado se encuentra la iglesia y detrás de esta, la capilla de San Miguel, construida en torno al año 940. Saliendo de la villa hacia el norte pasaremos por el Santuario de A Virxe do Cristal y a mano izquierda veremos Vilanova dos Infantes, un pintoresco pueblo en el que está la Torre de Vilanova dos Infantes, que es lo único que se conserva de la fortaleza construida en el siglo X. Hemos disfrutado de una visita guida, donde hemos podido ver el claustro y el interior de la capilla de San Miguel
De Celanova regreso a casa.


















Jueves, 2 de agosto de 2018


Ruta por Feria de Calvos – Orense
Hoy nos levantamos tarde, comemos en la feria de Calvos y aprovechamos para ver la ciudad de Orense por la tarde.
Calvos a Orense, 67 Km.
Ourense es la ciudad del agua. Ocho puentes cruzan aquí el río Miño, que en tiempos de los romanos era una mina de oro. Ahora ya no hay oro, pero sí unas aguas muy valiosas: las aguas termales.
Las hay por toda la ciudad y muchas son gratuitas. Como las termas de A Chavasqueira al borde del río, donde podrás disfrutar de un baño Zen. Las aguas brotan también a 65º en pleno centro, en la fuente de As Burgas, que con el Santo Cristo y el Puente Romano, son los símbolos de la ciudad.
Pero además Ourense tiene una original Praza Maior inclinada, y un casco histórico rico en iglesias y capillas. El Pórtico del Paraíso de la Catedral conserva aun su policromía original del siglo XIII.
Iniciamos nuestro recorrido por la ciudad de Ourense en su señal de identidad por antonomasia, las Burgas, fuentes de aguas termales que manan a 67º, y que favorecieron los primeros asentamientos humanos en el lugar. Tomamos camino por la rúa Barreira y llegamos a la Praza Maior, centro de la ciudad antigua, donde surge la Casa Consistorial y el Museo Arqueológico (también conocido como Pazo do Bispo). Estamos en una zona con un gran sabor medieval, en un entorno que parece retrotraernos en el tiempo. Se subimos por una escalinata situada en uno de sus costados llegaremos a la Iglesia de Santa María Madre, que en su portada conserva columnas del s. VI, vestigios de la primitiva catedral sueva de los tiempos en los que Ourense fue la capital del reino germánico. Cruzamos la plaza de la Magdalena fijándonos en su hermoso cruceiro y nos encaminamos a la del Trigo, en la que se comerciaba en tiempos pretéritos con este cereal, rodeada por soportales y casas nobles y con la denominada Fonte Nova en el centro. Se prolonga en la plaza de Damas, que fue patio de naranjos de la Catedral.
Llegamos así a la Catedral, templo románico de transición al gótico con aires de fortaleza. Conviene que nos detengamos a hacer una visita detallada, recomendándose especialmente la Capilla Mayor, la Capilla del Santo Cristo, el Cimborio, el Pórtico do Paraíso, de clara influencia de la escuela compostelana del Maestro Mateo, y el Claustro(conocido cómo Claustra Nova), en el que se sitúa el museo catedralicio. La visita al templo, con sus claroscuros, múltiples capillas y ambientes parece introducirnos en una atmósfera y universo realmente mágico.
Continuamos camino rodeando la parte posterior del templo que acabamos de visitar y, siguiendo la calle Juan de Austria y Coronel Ceano, llegamos a la Iglesia de Santa Eufemia, con una lograda fachada cóncava en estilo barroco compostelano. Es el momento de tomar un pequeño descanso y para eso estamos en el lugar ideal, la zona de vinos más tradicional de la ciudad, que cuenta también con varios cafés culturales. Es un área muy animada, viva, especialmente bonita al atardecer y en las primeras horas de la noche.
Cuando retomamos la ruta lo hacemos por la calle Lamas Carvajal, pasando por delante del Pazo Oca-Valladares, renacentista del s. XVI, sede del Liceo ourensano. Hace falta pedir permiso para visitar su patio columnado con una hermosa fuente en su centro. Una vez bordeado el edificio giramos a la derecha por la Avenida de Pontevedra y llegamos a la Alameda, con magníficos ejemplos de edificios modernistas cerrándola. Al lado de la Alameda está el tradicional Mercado de Abastos, cerrado por la tarde























Viernes, 3 de agosto de 2018
Paradela – Lobios – Serra do Gerés

De Paradela a Lobios y de aquí hasta el Miradouro Pedra Bela, en el valle del Gerés los bosques son esplendorosos. Vegetación y agua es la tónica general. Árboles que inundan cada rincón de verde en primavera y verano. 
Al Valle del Gerés accedemos desde Lobios (Ourense) por la frontera de Portela do Homem. En los alrededores de Portela do Homem se conservan miliarios romanos, al igual que en diversos puntos del valle. Eran los antiguos postes kilométricos de la Vía Nova, calzada romana que comunicaba Braga (Bracara Augusta) con Astorga (Asturica Augusta) en tiempos de los romanos.
Recorrer en coche la carretera que conduce a Caldas do Gerés, la principal población del valle, supone sumergirnos en la frondosidad del bosque autóctono. Vamos hasta el Miradouro Pedra Bela para obtener una generosa perspectiva del valle y de la sierra. Nos detenemos luego para visitar la Cascada do Arado, pequeña pero bonita. Son algunos de los lugares más representativos del Parque Nacional Peneda Geres.













Caldas do Gerés ha destacado desde el pasado por ser una villa termal y de descanso, al igual que ocurre en Lobios, al otro lado de la frontera. Viviendas, hoteles y restaurantes permanecen inmersos en la vegetación.
Desde Pedra Bella o Cascada do Arado vamos a Serra do Pisco, a Pitões das Junias.
La Serra do Pisco limita Galicia y Portugal, o lo que es lo mismo, el Parque Nacional PenedaGeres y el Parque Natural Serra do Xurés, aunque ambas áreas naturales y culturales comparten compromisos que han originado la primera Reserva da Biosfera transfronteriza de Europa, la Reserva Gerés-Xurés.
Estamos en la parte más oriental del Parque Nacional, cuyo clima riguroso y complicadas comunicaciones la han mantenido todavía más aislada si cabe. 
Continuando la una ruta en coche por la Serra do Pisco nos acercamos a otros pueblos, como Covelaes o Paredes do Río. En este último merece la pena detenerse para conocer la aldea-museo. Un conjunto hidráulico de canales de agua y varios molinos constituyen el ecomuseo, donde el protagonista es el agua.
Su ambiente rural ofrece entrañables rincones compuestos por casas de piedra, calles adoquinadas, hórreos o bancos de piedra a la sombra de las parras.











Transitamos por la morfología desolada del planalto de la sierra hasta llegar a Pitões das Junias. Esta aldea es la más alta de Portugal, enclavada a unos 1200 m de altitud. en la comarca del Barroso, en plena sierra del Gerés. Una apiñada agrupación de casas de piedra con tejados de tejas, huertos de cultivo y un paisaje de "penedos" graníticos al fondo. También divisamos el embalse de Paradela. Bonito lugar es donde estamos alojados.
Comimos el Cocido en Casa do Preto., para luego hacer una pequeña excursión al Monasterio de Santa María das Junias y a la Cascada da Mizarela. 
La cascada de Mizarela: Se trata de una ruta señalizada a la cascada y al monasterio. Un camino adoquinado en descenso conduce a unas escaleras de madera que finalizan en un mirador frente a la cascada de Pitoes das Junias. La cascada se despeña por una pared de roca de considerable altura.
El monasterio de Santa María das Junias se encuentra en ruinas, entre robles y al lado del río Campesinho. Recorriendo las ruinas podemos observar la lareira, dependencias, almacenes, arcos de medio punto. El molino que se usaba en el monasterio todavía se mantiene en pie junto al río. La iglesia se conserva íntegra, restaurada con tejado de tejas.
Su origen es antiquísimo. Parece que se remonta al siglo IX, aunque sufrió una remodelación en el año 1147, (fecha grabada en su fachada), tras las luchas con los árabes. En sus tiempos dependió del gallego monasterio de Oseira, y en el siglo XIX finalizó la actividad monástica.
Ambos lugares los visitamos mediante un sencillo paseo de dos horas, el Trilho Pitões das Junias, usando los mismos caminos que en el medievo utilizaban los súbditos del monasterio.
















Sábado, 4 de agosto de 2018


Paradela - Ponte de Lima 
Un paseo por Ponte de Lima, tranquila localidad del norte de Portugal, donde encontramos un compacto y acogedor centro histórico, elegantes edificios, excelente gastronomía, y agradables paseos a orillas del río Lima, aunque lo que destaca por encima de todo es el puente medieval.
Estoy de acuerdo con quienes piensan que los españoles acudimos a Portugal buscando el sosiego y el ritmo tranquilo que desprende, como volviendo varias décadas atrás. En cambio, los portugueses vienen a España para acelerarse unos cuantos años y unirse a nuestro palpitar más trepidante. Pero cuando vuelven a su país, siguen apostando por el lento fluir.
Así lo percibimos en cualquiera de sus pueblos o aldeas. Y Ponte de Lima no iba a ser diferente. El puente y el río Lima dan nombre a la población. El Lima, que en Galicia conocemos como Limia, en su trayecto desde su nacimiento en el Monte Talariño (Ourense) hasta su paso por la Serra do Xurés, desemboca después en Viana do Castelo formando una pequeña ría.
Si de algo presume Ponte de Lima es de ser la villa más antigua de Portugal, título que ostenta a la vez con orgullo y con modestia, balanceándose entre lo rural y lo urbano. También se enorgullece de su puente de casi 400 metros de longitud, construido inicialmente por los romanos hace 2000 años, y reconstruido en la Edad Media, uno de los más vistosos de Portugal.
En tiempos de los romanos, el río Lima se conocía como “río do esquecemento”, corriendo la creencia de que cualquiera que lo atravesase lo olvidaría todo. Así lo pensaba el ejército romano que encomendado de conquistar estas tierras, hasta que el general Décimo Juno Bruto se atrevió a cruzarlo, y, llamando a cada soldado por su nombre desde la otra orilla, demostró a sus tropas que mantenía la memoria.
Este puente formaba parte de la Vía Romana de Braga. Más tarde, en la Edad Media, era notable la afluencia de peregrinos que seguían el Camino de Santiago. Ahora es lugar de paseo de locales y visitantes, con el fin de cruzar a la otra orilla para visitar los afamados jardines, la iglesia de Santo Antonio, o continuar pedaleando por la Ecovía a orillas del Lima. Nosotros también lo cruzamos, y creo que mantengo la memoria.
El Largo de Camões es tanto un lugar de paso como un espacio donde quedarse un rato. En esta plaza frente al puente se disponen terrazas, o banquitos en los que tomar asiento para sentir el pulso de la vida diaria. Es también una puerta de entrada a las estrechas callejuelas con suelo adoquinado del casco medieval, antiguamente amurallado. Un par de torreones de la antigua muralla todavía se conservan hoy en día.
La arquitectura medieval está presente en cada rincón del centro histórico, tanto en casonas nobles y palacios como en viviendas más modestas.
Como no podía ser de otra manera en Portugal, varias son las iglesias que se esparcen por Ponte de Lima, de diferentes épocas históricas y en diferentes estilos arquitectónicos.
Junto a la Iglesia Matriz, construida en el siglo XV en estilo gótico, una estatua rinde homenaje a la fiesta más destacada de la villa, la Vaca das Cordas. Guiada por cuerdas, la vaca que se suelta la víspera de Corpus Christi corre por las calles en dirección a la Iglesia Matriz, para después encauzarla al Largo de Camões.
La estatua de la vaca no es la única en Ponte de Lima. Dispersas por calles y plazas encontramos unas cuantas más, con diferentes significados.
Las mañana era muy animada en Ponte de Lima, sábado y mercado marcado por el bullicio de las compras, que tanto se pueden realizar en tiendas tradicionales que ofrecen productos artesanos. La orilla del río Lima se convierte en un enorme aparcamiento.
En resumen, Ponte de Lima es una apacible villa en la que pervive un ambiente tranquilo y amable. Sin grandes monumentos, no atrae a demasiados turistas, convirtiéndose en un lugar agradable en el que percibir el lento transcurrir de la vida portuguesa, pero es sin duda muy hermosa.
Hemos comido en el restaurante Sabores de Lima, un increíble Bacalao al estilo de la casa.
Regreso por la tarde para preparar nuestra marcha.




















































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